Las autoridades detallaron que las víctimas inicialmente pagaron a los traficantes grandes sumas de dinero para dejar su país de origen y ser transportados.
Tres de las más importantes productoras de chocolate del mundo, Mars, Nestlé y Hershey están acusadas por engañar a sus consumidores, pues sin saberlo financiaban el negocio de la esclavitud infantil en Africa Occidental.