Xóchitl bailaba en el centro nocturno “El Caballo Blanco” para pagar su carrera como abogada, mantener a sus dos hijos y ayudar a su familia para salir adelante
Uno de los sueños de Erick era garantizar que sus hijos tuvieran la educación que él ya no pudo continuar, pues la necesidad lo llevó a tener que dejar los estudios para trabajar y sobrevivir