El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, juró este jueves ante el Tribunal Supremo de Justicia por un segundo mandato hasta el 2025 desafiando un cerco diplomático de gobiernos que cuestionan la legitimidad de su reelección, en un país donde la profunda crisis económica ha empujado a millones a emigrar.
“Juro, a nombre del pueblo de Venezuela (…) Lo juro por mi vida”, dijo Maduro durante su discurso de toma de posesión, al tiempo que exclamó ¡Viva, México!, como agradecimiento por el apoyo que ha recibido del Gobierno de México y su equipo.
El mandatario venezolano amenazó con disolver la Asamblea Nacional en caso de que decida reemplazarlo con un gobierno provisional y llamar a elecciones como lo anunció el 5 de enero en la instalación de la nueva legislatura.
Maduro dijo que la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), que también ha sido cuestionada, “actuará contra la Asamblea Nacional si intentan un golpe de Estado”.
La ANC no ha sido reconocida ni por el Parlamento nacional ni gran parte de la comunidad internacional por haber sido creada por el régimen para liquidar la Asamblea Nacional y cambiar la actual constitución.
Maduro asumió en medio de la peor crisis económica que haya sufrido en su historia moderna el país con las mayores reservas petroleras del mundo, y en momentos en que se afianzan gobiernos conservadores en Latinoamérica.