Alemania dejará de administrar la vacuna de COVID-19 de AstraZeneca, informó el lunes un portavoz del Ministerio de Salud, lo que convierte a Alemania en el último de los países europeos en interrumpir su uso después de conocerse que varios receptores enfermaron tras recibir la inyección.
El Ministerio dijo que la decisión se basa en las recomendaciones del Instituto Paul Ehrlich, la autoridad alemana encargada de las vacunas.
“Siguiendo una recomendación del Instituto Paul Ehrlich, el Gobierno, por precaución, suspende la administración de la vacuna de AstraZeneca”, dijo el ministerio en un comunicado, añadiendo que su titular, Jens Spahn, ofrecería más detalles en una conferencia de prensa el lunes más tarde.
Varios países de la UE han pedido que se suspenda la distribución de la vacuna de AstraZeneca tras los informes de Dinamarca y Noruega sobre posibles efectos secundarios graves, como hemorragias y coágulos de sangre.
La semana pasada, Lothar Wieler, director del Instituto Robert Koch de Enfermedades Infecciosas de Alemania, dijo que no había pruebas de que los pacientes que recibieron la vacuna tuvieran más probabilidades de sufrir afecciones sanguíneas que los pacientes de un grupo de edad similar.
Muchos millones de personas en Reino Unido han recibido hasta ahora la vacuna de la farmacéutica británico-sueca.
Información de Reuters