El número de muertos por el peor tiroteo en la historia moderna de Canadá aumentó a 19, entre ellos una policía y el atacante, informó el lunes la policía canadiense, agregando que esperan que suba la cifra de víctimas de los ataques perpetrados el fin de semana en la provincia de Nueva Escocia.
La Real Policía Montada Canadiense (RCMP) identificó al atacante como Gabriel Wortman, de 51 años, que trabajaba como laboratorista dental, y que disparó a personas en varios lugares. La policía todavía no conoce los motivos y afirmó que no veía vínculos con al menos algunas de sus víctimas.
En un momento, el pistolero se hizo pasar por policía y disfrazó minuciosamente su automóvil para que pareciera una patrulla, en una masacre de 12 horas que comenzó el sábado por la noche, dijeron autoridades el domingo.
“Estamos relativamente seguros de haber identificado todas las escenas del crimen”, dijo el lunes el superintendente jefe de RCMP de Nueva Escocia, Chris Leather. Agregó que incendios provocados en algunos de esos sitios, en su mayoría residencias, dificultaban la búsqueda de otras víctimas.
“Creemos que aún puede haber víctimas dentro de los restos de esas casas que se incendiaron”, afirmó Leather.
El primer ministro Justin Trudeau se refirió a los ataques, destacando a la policía que perdió la vida. La uniformada era Heidi Stevenson, de la RCMP, quien murió el domingo en el tiroteo.
“Sucedió en localidades pequeñas: Portapique, Truro, Milford y Enfield, lugares donde las personas tienen raíces profundas, donde las personas conocen a sus vecinos y se cuidan unos a otros”, añadió el primer ministro. “Ahora esas comunidades están de luto y Canadá está de luto con ellas”.
Información de Reuters