José María Rioboó, presidente de Grupo Rioboo, principal constructor de las obras públicas en las administraciones pejistsa y primer interesado en que el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México tenga su ubicación en la Base Aérea Militar en Santa Lucía, fue motivo de burla en las redes sociales por un desafortunado comentario.
Durante la entrevista, Rioboó dijo: “Yo pienso hoy en día, con la tecnología que hay, con los radares vía satélites que hay, yo no he visto (…) los aviones no pueden chocar, no pueden chocar, automáticamente se repelen”.
Los otros miembros de la entrevista manifestaron no estar de acuerdo al comentario emitido por Rioboó y continuaron a conversar de otros planteamientos.