El patrocinador que otorga dicho reconocimiento, la cervecera Budweiser, habría sido el motivo principal de dicha situación, ya que por petición a la FIFA, no quiere relacionarse con ningún tipo de escándalo legal o extra futbol de cada jugador.
Según la información de The New York Times, Márquez, de 39 años, está en la lista negra del Departamento del Tesoro de Estados Unidos de personas que según la institución han ayudado a lavar dinero a los cárteles de la droga. Su inclusión en la lista prohíbe a los ciudadanos, empresas y bancos estadounidenses tener cualquier tipo de relación con él.
“Si llegara a tener el mejor desempeño en un juego, él seguramente no será llamado Jugador del Partido Budweiser. Su hospedaje es cuidadosamente supervisado para evitar que se aloje en lugares que tengan vínculos con estadounidenses, incluso si eso significa conseguirle un cuarto de hotel alejado del resto del equipo. Y sin importar qué tan arduo sea su trabajo en el campo, Márquez ha aceptado no recibir pago por su participación”, señala el reporte de NYT.
Aunque no ha sido acusado penalmente, los activos financieros de Márquez en Estados Unidos, así como sus bienes mexicanos con vínculos al sistema financiero estadounidense fueron congelados. Él ha negado repetidamente cualquier nexo con narcotraficantes y ha contratado a un equipo legal para desafiar su inclusión en la lista y tranquilizar a los patrocinadores inquietos.
Uno de sus abogados, José Luis Nassar, quien ha fungido como vocero, ha dicho: “Estamos en franca fase de colaboración” con funcionarios estadounidenses para resolver el asunto detalló NYT.
La Federación Mexicana de Fútbol (FMF) y la FIFA conocen la peculiar situación de Márquez desde hace meses, pero le permitieron ser convocado y acudir al torneo. De hecho, ambos organismos han trabajado en conjunto para llevar su participación en el torneo de modo que evite cualquier problema con el Departamento del Tesoro, según varias personas involucradas con la planeación que hablaron bajo la condición de anonimato.
“La FIFA está consciente de la situación del jugador Rafael Márquez y estamos en contacto frecuente con la asociación de fútbol de México”, se lee en un comunicado de la federación internacional. La FMF, en su propio comunicado, reconoció que ha tenido que hacer ajustes para Márquez, quien es también capitán del equipo.
“Tomamos en serio las acciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos y hemos estructurado nuestras operaciones en Copa del Mundo para no violar las leyes sobre las sanciones de Estados Unidos”, dijo la FMF, la cual tiene significativos intereses comerciales en Estados Unidos, en especial con su socio exclusivo para los derechos comerciales, Soccer United Marketing.
Con información vía Forbes.mx
Periodista. Dedicada a la producción de material multimedia periodístico.