En redes sociales se ha hecho viral la publicación de una mesera que se queja de la cantidad de propina que dejó un comensal que cenó en el restaurante en que la joven trabaja.
De acuerdo con lo informado por el diario Excélsior, la molestia de la joven fue porque el cliente pagó cuatro mil pesos por su comida, dejó 86 pesos de propina por el servicio.
En la Ciudad de México, sin embargo, las propinas por parte de los clientes no son obligatorias.
“Me dejaron 86 de propina, si no tienen para pagar un servicio, no salgan a restaurantes amigos. Pidan en su casita, para llevar y tomen en su casa. No tengo porque andar pagando su servicio, gatos”, comentó la mujer, quien presuntamente trabaja como mesera en hooters.