Mary: “And Isak Dinesen, and Carl Jung…”
Yale: “Scott Fitzgerald…”
Mary: “Lenny Bruce. Can’t forget Lenny Bruce, now, can we? How about Norman Mailer? And Walt Whitman?”
Isaac: “I think that those people are all terrific, everyone that you mentioned.”
–Woody Allen, Manhattan.
La peor disculpa que he escuchado… Oootra vez Nicolás Alvarado. Orinando sobre la valiente defensa que Nexos había hecho de su derecho a escribir idioteces, corrió con Ciro para reiterar su ignorancia y arrogancia culterana-tercermundista-maniqueo-reduccionista #depenajena. Nuevamente ¡gracias TVUNAM! Excelente criterio, Graue y Conapred. Porque sí, ojo con la discriminación social, racista, sexista… y mucho ojo cuando viene de funcionarios o comunicadores. Indispensable anotar que aceptó que renunciaba para poder criticar sin llevarse a la UNAM entre las patas. Increíble que con semejante castigo le siga rebasando la lección: “suscribo cada palabra”, “no era la oportunidad”, “el momento político del país.” También se escondió justificando que “es un texto irónico, socarrón, juguetón…” Es decir: disculpen el timing, pero no entendieron. Grandiosa disculpa. Olvida que la crítica sirve al criterio para ordenar, no para discriminar.
Aburrido y mareado entre el repaso de endecasílabos y alejandrinos, las referencias a Wikipedia de unos y a la nada de otros todavía más pesados, mi conclusión es que estamos poco preparados para tratar los temas de la estética. Me veo obligado a volver a defender la poética de Juan Gabriel desde el sentido más puro, heleno y heideggeriano de la palabra, a saber, la ποίησις. Justo considero que se podría conceder toda licencia técnica y formal a un artista que logra una auténtica proyección de sí y de su entorno en condiciones totalmente precarias. Pero González de Alba, de un plumazo parece reducir la poética a algo que no explicó y que no está ni en Juanga ni en Cri-cri. Más acierta en su error cuando cita la parte simple y divertida del Chorrito, pero olvida la introducción tipo Gershwin: “La gota de agua que da la nube como regalo para la flor, en vapor se desvanece cuando se levanta el sol. Y nuevamente al cielo sube hasta la nube que la soltó. La gotita sube y baja, baja y sube al compás de esta canción.” Se vale estudiar, pero no todo es contar sílabas ni buscar rimas o yambos… ese pequeño estribillo es genial y quien no lo vea necesita lentes nuevos o dedicarse a algo que le guste, que sí le guste.
Parte del problema es que se nos olvida que la libertad de expresión no hace ciencia, el derecho no otorga razón. Otra parte del problema es que nunca falta el que se licencia: Ciro Gómez Leyva concluyó el segmento cuestionando si Space Oddity u otras letras de Bowie eran buenas… el horror. Ya había transgredido lo sagrado en algún otro momento que criticó Llésterdei de los Bítles (así habla Ciro), reduciéndola a un periodo en que estos no eran tan buenos… así como lo lee. Y ahí es donde más se la menta uno (sic) ante la falta de verdaderos intelectuales que orienten (pongan en su lugar) a comunicadores fanfarrones como Ciro que se creen dueños del juicio y la verdad solo porque tienen el sagrado derecho de hablar.
¿Intelectuales en este lejano lugar retacado de nopales? No, los que antes se reían citando grandes pensadores, ahora solo se burlan de los artistas mainstream; las conversaciones que se imaginaba Woody Allen en Manhattan, en estos círculos de farsantes se reducen a “Belinda jajaja” y “Brittney jojojo”.