Debido al confinamiento decretado en Francia, empresas cerveceras planean destruir cerca de 10 millones de litros de cerveza por su baja demanda.
“El cierre brutal de cafés, restaurantes, y la paralización de la actividad turística y la anulación de todos los festivales y salones han dejado más de 10 millones de litros de cerveza, mayoritariamente en barril” anunció el sindicato de este mercado.
Las cervezas más populares del aquel país no están pasteurizadas, por lo que si no se consume se echa a perder. “La destrucción de esta cerveza tendrá también un costo nada despreciable para las empresas”, señala el sindicato.