Por La Vanguardia
El 6 de diciembre, un grupo de turistas se sumergió en aguas del Pacífico dentro de una gran jaula de observación para darse un baño con tiburones.
Pero la experiencia no fue según lo previsto. Un ejemplar de tiburón blanco se acercó a la estructura y quedó atrapado en uno de sus orificios. El escualo intentó liberarse sin éxito y permaneció con la cabeza atrapada durante 25 minutos, desangrándose. Ninguno de los presentes trató de ayudarle y el animal acabó muriendo.
Así lo ha denunciado el activista Arturo Islas Allende. En un vídeo difundido en Facebook, advierte: “Lo que te voy a compartir es fuerte si eres sensible a las imágenes duras”.
A continuación, se muestra el momento en que el tiburón blanco quedó atrapado en la jaula sin que nadie hiciera nada para rescatarlo. Segundos después, Un mensaje escrito aparece en pantalla: “El responsable es el canadiense Mike Lever, dueño del barco Nautilus”.