En los últimos cinco años cuatro Oscar fueron para los mexicanos. Entre ellos, González Iñárritu quien acompañó a Del Toro en la fiesta que se realizó después de la entrega de los galardones: “¡Vamos a construir un muro de puros Oscar!” expresa alegra y suelta una enorme carcajada.
Guillermo del Toro dejó otro momento memorable: Al recoger su segundo Oscar de manos de Warren Beatty, abrió el sobre y comprobó que efectivamente era el ganador e hizo un gesto hacia el público como diciendo “¡es verdad!” que ya está dando vueltas por las redes.
“Es muy hermoso”, dice Iñárritu después de abrazarse con Gary Oldman, que se cruza con él cuando venía de grabar su nombre en la estatuilla. “La película de Guillermo toca el corazón, y cuando una película toca el corazón, no hay competencia. El corazón de El Gordo es tan grande, está tan lleno de cosas. El Gordo come cultura. Tiene tanta sensibilidad y tanta generosidad que su corazón va a explotar”.
Con información de El País
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